Los diamantes
No debería haber llamado diario a este blog. Ahora me siento un poco obligado a escribir todos los días. Aunque, por otra parte, es muy entretenido.
También he estado pensando que si hablase todos los días sobre lo que hago como médico forense usaría mucho la opción de "cortar y pegar"; así de rutinaria es nuestra tarea. Supongo que habrá gente que piense que nuestro trabajo es asqueroso, o triste, o apasionante (sobre todo con la cantidad de series que están poniendo ahora sobre forenses). Seguro que nadie piensa que a veces nuestro trabajo es tedioso y rutinario, ya sabeis: el omnipresente esguince cervical, las contusiones leves en agresión, el ojo hinchado, la incapacidad de los pobres abuelos con Alzheimer avanzado, etc. Otras veces cae en nuestras manos (más bien nos lo echan encima o nos lo reparten, para decirlo más finamente) algo interesante. Un informe que nos hace pensar, estudiar, imaginar y entonces sí, entonces nuestro trabajo se vuelve apasionante. Somos como mineros que nos pasamos el día picando para extraer carbón (cada día hay que extraer más carbón) y de vez en cuando encontramos un diamante. Entonces pensamos que esta profesión vale la pena. Pero hay tan pocos diamantes...
Por cierto que sería bueno que los compañeros de los diferentes IML´s escribiesen para contar sus problemas o tambíen sus ventajas, ahora hay unos cuantos sitios para hacerlo
También he estado pensando que si hablase todos los días sobre lo que hago como médico forense usaría mucho la opción de "cortar y pegar"; así de rutinaria es nuestra tarea. Supongo que habrá gente que piense que nuestro trabajo es asqueroso, o triste, o apasionante (sobre todo con la cantidad de series que están poniendo ahora sobre forenses). Seguro que nadie piensa que a veces nuestro trabajo es tedioso y rutinario, ya sabeis: el omnipresente esguince cervical, las contusiones leves en agresión, el ojo hinchado, la incapacidad de los pobres abuelos con Alzheimer avanzado, etc. Otras veces cae en nuestras manos (más bien nos lo echan encima o nos lo reparten, para decirlo más finamente) algo interesante. Un informe que nos hace pensar, estudiar, imaginar y entonces sí, entonces nuestro trabajo se vuelve apasionante. Somos como mineros que nos pasamos el día picando para extraer carbón (cada día hay que extraer más carbón) y de vez en cuando encontramos un diamante. Entonces pensamos que esta profesión vale la pena. Pero hay tan pocos diamantes...
Por cierto que sería bueno que los compañeros de los diferentes IML´s escribiesen para contar sus problemas o tambíen sus ventajas, ahora hay unos cuantos sitios para hacerlo